Un perito es un profesional experto con conocimientos especializados y con experiencia en un área determinada. Se encarga de realizar informes periciales o valoraciones técnicas sobre un objeto o situación determinada.
Un perito realiza informes periciales, de tasación de daños, de certificación o inspección, válidos para todo tipo de procedimientos y puede llegar a actuar como experto en juicios, conocido como perito judicial.
Una peritación es un análisis minucioso de una situación que se resuelve en un informe pericial. Se analizan los hechos que rodean la cuestión, se valoran los daños y se determina la indemnización mas justa.
Un perito tiene la obligación de obtener todos los datos necesarios para poder dar una valoración y propuesta de indemnización adecuada y justa. Deberá entrevistarse con las partes, realizar las comprobaciones oportunas y utilizar todos los medios a su alcance para tener una visión lo más precisa posible del problema que tiene que resolver.
Debe realizar una valoración lo más justa posible de los bienes afectados o de las pérdidas consecuencia del hecho en sí. Se podrá realizar a valor de mercado, valor real, valor de reposición, valor técnico o valor de restos. Un perito debe conocer la diferencia entre estas valoraciones y aplicar los distintos criterios dependiendo de su ámbito de actuación.
El perito debe realizar una propuesta económica a las partes que intervienen en un caso, realizando el reparto correspondiente y aplicando las modificaciones que se apliquen en cada caso, tal y como puede suceder cuando hay un contrato de por medio, como es el caso de las pólizas de seguro.
El perito se encarga de ofrecer su conocimiento especializado sobre los temas solicitados por las partes interesadas. No sólo se limita a responder a las preguntas planteadas, sino que también ofrece su juicio profesional sobre aspectos que, por su formación y experiencia, puede discernir de forma clara y objetiva.
Investigar, detectar y prevenir fraudes, analizando evidencia y presentando conclusiones claras en tribunales.
Evaluar y analizar situaciones en una variedad de áreas, como siniestros, daños, o valoraciones.
Conocimiento técnico en sistemas eléctricos y electrónicos para evaluar fallos, daños, o funcionamiento.
Conocimiento legal y técnico para evaluar situaciones en las que se atribuye responsabilidad por daños a terceros.
Conocimiento técnico y científico para investigar y determinar las causas, origen y propagación de un incendio.
Conocimientos técnicos para investigar y determinar las causas y efectos de filtraciones, roturas o fugas en sistemas de agua.
Conocimiento especializado en evaluar el impacto económico de interrupciones o daños que afectan la rentabilidad de una empresa.
Conocimiento en tecnología y sistemas informáticos para analizar y evaluar evidencias digitales.
Conocimiento especializado en la evaluación y análisis de dispositivos electrónicos y sistemas relacionados.
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